Primero fue el Pebble, y ahora parece ser que le ha tocado el turno al Phosphor. En ambos casos, el responsable es la fábrica de ideas conocida como Kickstarter, un sitio web del que salen multitud de proyectos, cada cual más interesante. Este reloj basado en la tecnología e-ink cuenta con unas funciones avanzadas que no dejarán indiferente a nadie, como su predecesor, que recaudó 9 millones de dólares cuando sus creadores solo estaba pidiendo 100.000 dólares para iniciar la producción.