Cuando llegaron al mercado los relojes inteligentes que conocemos como smartwatches, muchas personas se preguntaron si éstos llegarían a sustituir a los smartphones así como su posible repercusión en la relojería convencional.
A día de hoy, ciertas reflexiones pueden hacernos llegar a la conclusión de que las repercusiones que los smartwatches iban a tener en nuestra sociedad se quedaron en poco menos que promesas, pues no lograron ser más que una extensión de nuestro smartphone, porque a pesar de los esfuerzos por hacer relojes independientes, la realidad es que mayormente dependen de un teléfono móvil, además de que tienen otros problemas como el de la autonomía y sumergibilidad entre otros. Y según parece, estas incertidumbres se están reflejando ya en las estadísticas de ventas pues si tomamos como fuente el último análisis de IDC (compañías tecnológicas de información) , las ventas de smartwatches han caído de forma preocupante. ¿Y quién resulta ser el principalmente afectado por ello? Ni más ni menos que el gigante Apple.
Pero qué nos dicen los números de las estadísticas. Los smartwatches han reportado ingresos por 3,5 millones de unidades durante el segundo trimestre de 2016, cifra que es un 32% menor respecto al año 2015 que supuso ventas de unas 5,1 millones de unidades. La empresa que más ha sufrido esta caída es la ya mencionada anteriormente Apple, quien pasó de tener el 72% de participación en el mercado, a sólo 47%, una muy fuerte caída de 25 puntos. Este descenso nunca estuvo en los cálculos estadísticos del gigante mundial, lo que está forzando a generar nuevas estrategias de venta y posicionamiento del producto.
Igualmente si nos fijamos detenidamente los datos que suceden dentro del segmento de los relojes inteligentes, Apple sigue siendo el número uno, pero midiendo la caída sufrida en cantidad de unidades supone más de la mitad con respecto al año anterior, específicamente un 55% para quedar en 1,6 millones de unidades cuando a las 3,6 millones que se vendieron en 2015.
A pesar de la realidad actual muchos expertos consideran que el mercado de los smartwatches está en etapa de inicio y estiman pleno crecimiento en un futuro, asumiendo que remontará en unos pocos años: Tal vez son muy optimistas ya que estos números nos ponen ante un escenario donde parece que los consumidores a día de hoy han perdido el entusiasmo por estos dispositivos. También un factor que pudo haber influído en la caída de ventas es que en los últimos meses no se ha presentado mejoras nada atractivas que generen un nuevo aliciente de compra. ¿Estarán los smartwatches destinados a morir o han venido para quedarse pero sin el protagonismo que se vaticinaba? Y tú, ¿qué opinas?
Wearables
Si diferenciamos un reloj inteligente smartwatch respecto a una pulsera inteligente o denominada como wearables aquí se puede decir que este segmento por separado arroja datos de crecimiento. Apple y otras compañías no suelen dar números detallados de ventas para sus wearables, sólo se conocen por mediciones estadísticas externas, por lo que estamos ante una panorámica de un grupo de artículos hasta cierto punto desconocido. En esta categoría de accesorios posiblemente habrá incremento en las ventas y se debe a que cada vez más compañías están entrando en este segmento, y las que actualmente tienen presencia como Garmin, están ampliando su portafolio de productos, con el agregado de ofrecer precios realmente asequibles, que permiten a más personas poder tener acceso a uno de estos dispositivos.
Lo que podemos afirmar por la gran aceptación de wearables de la firma firma Garmin, es que ofrecen pulseras de Actividad de diseño moderno, con materiales de alta calidad y tecnología propia para interactuar con otros dispositivos como smartphones. Una de las líneas de artículos que Garmin acaba de lanzar al mercado es la denominada Garmin Vívosmart HR y muy pero muy reciente su versión mejorada Garmin Vívosmart HR+, donde parece que han acertado en lo que el consumidor o el usuario promedio quiere y busca de estas pulseras de alta prestación.
